Cada año, ante la noticia de un embarazo, cientos de gatos son abandonados por la temida Toxoplasmosis. Se trata de un tema serio, ya que contraer la enfermedad durante la gestación podría causar aborto, malformaciones o problemas neurológicos para el feto. Pero si lees con atención, verás que el abandono está completamente injustificado, y que podrás seguir achuchando a tu pequeño peludo sin que suponga el mínimo riesgo para ti o tu bebé.
Qué es la toxoplasmosis?
Es un coccidio que infecta prácticamente a todas las especies de sangre caliente, incluído el ser humano. Es más, muchos de nosotros ya hemos pasado la enfermedad sin darnos cuenta, como una simple gripe, y hemos desarrollado anticuerpos.
Cómo se contrae?
El contagio se produce al ingerir los quistes del parásito, por ejemplo:
- A través de frutas y verduras mal lavadas
- Al comer carne cruda, poco cocinada o embutidos
- A través de las heces de gatos infectados
Vamos a extendernos en este último punto:
Un gato se infecta ingiriendo presas como ratones o pájaros infectados, o bebiendo agua contaminada por el parásito. Esto significa que un gato casero es prácticamente imposible que contraiga la enfermedad. Y se estima que de los callejeros solo un 2% llega a hacerlo. Y en ese caso solo expulsará el parásito alrededor de un mes en toda su vida, quedando inmunizado.
¿y cómo nos lo contagia a nosotros?
Ni tocándolo ni acariciándolo, solo de una manera: por la ingesta de sus heces mientras tenga la enfermedad activa. Si, has leído bien. Para contraer la enfermedad a través de nuestro gato deberían darse todas y cada una de las siguientes circunstancias:
- Que el animal esté infectado
- Que las heces estén en la arena por más de 24h, que es cuando los ooquistes se vuelven infecciosos
- Que toquemos esas heces con las manos y nos las llevemos a la boca
¿Conclusión?
Lava bien las verduras antes de su consumo, cocina la carne a altas temperaturas, o congélala a -20º durante dos días, bebe solo agua potable… y sigue abrazando a tu gato 😉 Y en caso de duda, consulta siempre con tu veterinario.