La llegada de un cachorro a casa requiere de toda nuestra paciencia y comprensión. Pasaremos momentos inolvidables, llenos de risas y emoción, pero también muchos otros de fregona en mano y frustración.
A continuación os damos unas pautas para enseñar a nuestro peludo de forma positiva donde debe hacer sus pisetes:
Pondremos varias capas de periódico o empapadores en la zona donde el peque tiene preferencia por orinar. En el momento en que lo veamos hacer en otro lugar diferente, lo cogeremos de forma inmediata pero suave y amorosa, colocándolo encima de los periódicos, felicitándolo y llenándolo de caricias. Ten en cuenta que su instinto lo llevará a hacerlo en zonas alejadas de donde come o duerme.
Poco a poco podrás identificar los momentos previos: dando círculos, olisqueando el suelo o mostrando una actitud nerviosa, a lo que deberás estar muy pendiente, sobre todo después de dormir, comer o jugar. En ese momento lo llevaremos al periódico y lo llenaremos de felicitaciones.
NUNCA debemos de castigarlo o reñirle, aunque se le escape algún pis fuera de sitio, tiempo y paciencia. Si recibe una regañina no la asociará al lugar inadecuado, sino al hecho en sí de orinar o defecar. Ten en cuenta también que el control sobre sus necesidades no es total hasta los 4 meses.
Debemos limpiar la zona con productos como el jabón blanco y agua caliente, nunca amoniaco ni lejía, ya que este olor los atrae y los invita a orinar en ese lugar.
Utilizaremos este procedimiento mientras no tenga todas sus vacunas, y sus visitas a la calle sean en brazos, a zonas controladas, y alejados de cacas o pises de otros perretes.
Una vez completado el calendario de vacunación, ya podemos sacarlo a pasear! y paulatinamente cambiaremos los periódicos por la calle. Deberás de bajarlo varias veces al día, y sobre todo después de dormir, comer o jugar.
Nunca regreses a casa justo después de que haga sus necesidades, alarga el paseo aunque sean 10 minutos, ya que para ellos la calle resulta algo positivo y sino podrían asociar la eliminación con el final de la diversión, aguantando las ganas hasta volver a casa.
Y nuevamente usa el refuerzo positivo!! NUNCA lo castigues o le riñas si hay un escape donde no debe. Sin embargo prémialo cuando lo haga en el lugar correcto. Puedes usar snacks para cachorros, caricias, expresiones efusivas (muy bien!!!!) o todo a la vez.